12/10/16
Grupo Insud
Generales
Bienal de Venecia: Juan Carlos Distéfano es el representante del país
El acto inaugural contó con la presencia del canciller Héctor Timerman, la directora general de Asuntos Culturales de la Cancillería Magdalena Faillace, el escultor Juan Carlos Distéfano acompañado de su esposa, la dramaturga Griselda Gámbaro, y la curadora María Teresa Constantin. A la Bienal, la delegación de artistas argentinos invitados por Cancillería fueron Martín di Girolamo, Fermín Eguía, Tomás Espina, Maximiliano Gómez Canle, Sebastián Gordín Adriana Lestido, Zulema Maza y Viviana Ponemian. También estuvieron presentes el presidente de la Bienal de Arte de Venecia, Paolo Baratta, los coleccionistas de arte Hugo Sigman, CEO de Grupo Insud y Andrés Buharde y representantes de la cultura argentina, Teresa Anchorena, Orly Benzacar, Ana Gallardo, Marta Minujin, Adriana Rosenberg, Graciela Smith y el propio Hugo Sigman. La presidenta destacó la trayectoria y el valor de las obras del reconocido escultor, mientras que el canciller Héctor Timerman subrayó el orgullo de nuestro país de "contar con un pabellón propio" con un comodato por 22 años. El artista - Fue seleccionado para participar de la Bienal de Venecia. Por su parte, el reconocido artista se mostró agradecido por representar a nuestro país en la Bienal. La elección de Juan Carlos Distéfano, cuya movilizadora obra hace reflexionar sobre la condición humana, viene a hacer justicia, de manera incuestionable, a un maestro cuya obra emerge de la traumática historia sociopolítica de nuestro país en la segunda mitad del siglo XX, logrando trascender el plano de lo local para encumbrarse en el panorama del arte universal, que desconoce fronteras físicas y temporales. Debió abandonar el país junto con su esposa luego de 1976 porque sobre la novela de Gámbaro Ganarse la muerte pesaba un decreto de prohibición de la dictadura militar. A esto se sumó la desaparición de algunos amigos y el clima de terror que imperaba en el país. La pareja se exilió durante tres años en España, pero la nostalgia del país la hizo volver antes de que terminara el gobierno militar. Reflexivo acerca de su obra y del arte en general dijo alguna vez: "Creo que el arte tiene que ver con el deseo, más aun, diría con lo erótico. Hacer una obra de arte es responder a una pulsión erótica. En mí, el trabajo nunca es un proceso especulativo; no hay programa para realizar la obra. Trabajo por impulso, por enamoramiento.